Hipocresía

Hipocresía, estructurada, sólida, demacrada, frágil, mentirosa. Podría seguir por hojas y hojas dando características de lo que para mi es una hipocresía. Un estrecho camino entre pensamientos, tal vez, porque muy probablemente, para mí un hipócrita, no sea lo mismo que para usted. Una verdad, una mentira, simples hechos.

Hipócrita, eso me dijeron alguna vez. Hipócrita, eso le dije a alguien alguna vez. Como una cadena sinfín que nunca termina, una pesadilla, un sueño, o tal vez, una pesadilla soñada.

Hipocresía, salida fácil, toma el camino más corto, que tal vez, sea el más largo. Por el cual camina entre gotas de agua sucia y nauseabunda, se pudre en un lugar del que no puede salir.

Hipocresía, se transforma en obsesión, o tal vez, en adicción. Adicción controlada, claro que no, que tipo de adicción sería si uno puede controlarla.

Hipocresía obsesiva, obsesión por hábitos, lugares, personas, no se sabe, en realidad si. Depende del caso. Alguna vez me dijeron hipócrita obsesiva, yo lo repetí hacia otra persona.

Hipocresía adictiva, uno no las describiría como adicciones comunes, no es alcohol, no es tabaco, no son drogas. ¿Qué es? Eso, una adicción al hecho de ser un hipócrita.

Hipocresía, soñada, deseada, odiada y detestada.

Mentiras no tan mentirosas, al hecho de ser un hipócrita, o de cualquier otra cosa. Porque uno puede ver lo que quiere. Mentira, que para mi es mentira y para usted es verdad.

Por tanto, ya no voy a describir un hipócrita, porque creo que usted no lo necesita, dicho y hecho, como me dijeron alguna vez que soy un hipócrita, adictiva y obsesiva, yo le digo a usted que es eso, y que haga lo que haga no dejara de serlo. Que siempre tomara el camino fácil, que siempre tendrá esa obsesión y esa adicción. Por tanto, usted es un hipócrita.